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No hay duda de que el aceite de oliva se ha convertido en un producto indispensable en nuestra dieta gracias, en gran medida, a los efectos positivos sobre nuestra salud. Ácidos grasos, vitaminas y otros elementos menos conocidos, como los polifenoles, son responsables de sus beneficios, haciendo que su consumo sea más que recomendable. Pero, ¿qué son los polifenoles del aceite de oliva y cómo contribuyen a mejorar nuestro bienestar?
Los polifenoles del aceite de oliva son componentes naturales que contiene este fruto;
el mayor beneficio asociado a estos compuestos es su gran capacidad antioxidante, protegiendo a nuestras células del daño causado por los radicales libres, combatiendo su oxidación y retrasando su envejecimiento.
Pero más allá de su alto poder antioxidante, estudios recientes han demostrado que la presencia de polifenoles en el aceite de oliva virgen extra se vincula a numerosos efectos positivos para nuestra salud. Los fenoles contribuyen a reforzar el sistema inmunológico, ayudan a controlar los niveles de colesterol LDL, coloquialmente conocido como “colesterol malo”, y protegen nuestra salud cardiovascular y ósea. Además, la presencia de los polifenoles del aceite de oliva virgen extra en la dieta se ha asociado a la prevención de algunos tipos de cáncer.
Existen pero 6 variedades que aun son mas excepcionales respectos a las otras gracias a las excepcionales cantidad de polifenoles y de otros elementos más de lo comun, cuatro de estas son Italianas: CORATINA ( con 560 mg/Kg) FRANTOIO (500 mg/Kg) OGLIAROLA (485 mg/Kg) MORAIOLO (480 mg/Kg) y dos española: CORNICABRA (495 mg/Kg) y MORISCA (435 mg/Kg).
Estas variedades han sido analizadas y tienen porcentajes mayores que hacen que el aceite que se ne produce garantiza un aporto excepcional de las polifenoles respecto a las otras variedades.
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